La edición de este año de ‘Supervivientes’ prometía mucho tras el casting confirmado pero no está cumpliendo las expectativas por unas cosas o por otras. Al no haber este año una gran estrella mediática como Isabel Pantoja o Rocío Flores en otras ediciones, se optó por el morbo de juntar a Alexia Rivas con Marta López o a Tom Brusse con su ex Melyssa, a la que dejó en ‘La isla de las tentaciones’ para irse con Sandra Pica. Las expulsiones, la audiencia y los pocos conflictos entre los concursantes no están ayudando.
Y es que tanto Marta recientemente, como Alexia ya han sido expulsadas, y tampoco coincidieron más de una semana al hacerse la separación entre los encallados en el barco y los de la isla. Al final se unieron en Playa Cabeza de León pero ya ha sido tarde, y encima, comparado con otras ediciones, reina la calma y las discusiones son tan absurdas y livianas, que parecen que las exageran para dar algo de juego.
3Mientras, sigue el culebrón en ‘Supervivientes’
Hablábamos del ‘escenón’ entre Tom, Sandra Pica y en medio Melyssa, sin comerlo ni beberlo. Ocurrió este martes lo que cabía esperar y había adelantado Sandra Pica: se reunió con Tom y le dijo que no estaba enamorada y que la relación por su parte no tenía futuro. Tom se sintió destrozado y planteándose abandonar el concurso, ya que no tenía por qué luchar. Reconoció que no ha dejado de pensar en ella y de ahí su buen comportamiento en el concurso respecto a posibles flirteos.
Sin embargo, no pudo faltar la duda entre la mayoría de los supervivientes, incluida la ex, Melyssa. Tanto ella como Silvia Pantoja, Giancarlo… casi todos verbalizaron que algo no cuadraba y que por lo que estaban hablando fuera de cámara y cómo se comportaban uno con el otro era todo menos una pareja que había roto. Apuntaban claramente a un montaje, entre la indignación sobre todo de Tom. Pero no sólo los moradores de la isla piensan eso, sino que en España es mayoritaria esa idea.