Cualquier emprendedor acaba convirtiéndose en un experto en ventas, pero, aún así, siempre existe un cierto miedo o nerviosismo en el momento de hacer un primer contacto con un posible cliente. La venta a puerta fría es un tema sobre el que se ha escrito muchísimo, y quién pone un proyecto en marcha tiene que conocer sus secretos.
Lo que se busca con la primera toma de contacto es romper un poco el hielo. Presentarse, presentar brevemente el producto o servicio que se ofrece, e intentar conseguir una cita para realizar una presentación comercial mucho más completa. Si la primera impresión es positiva, las probabilidades de conseguir una venta se incrementan notablemente.
3Condensar el mensaje para el primer contacto
Cuando se llama a una persona con la que todavía no se tiene ninguna relación, es preciso ser lo más directos posible. La idea no es hacer una presentación completa del producto o servicio por teléfono, sino despertar el suficiente interés en el interlocutor como para que acceda a un encuentro cara a cara en el que se realizará la presentación en profundidad.
La mejor forma de conseguir una comunicación directa es elaborar un pequeño guión. Un speech capaz de captar el interés, pero sin que llegue a sonar demasiado impostado o ensayado. La comunicación debe ser, ante todo, lo más natural posible.