Existen muchos tipos de salsas para la pasta. Junto con la salsa pesto, y la carbonara, quizás la otra gran salsa para la pasta que llega desde la cocina italiana es la salsa boloñesa original. Una auténtica delicia que se puede preparar de muchas maneras, pero no todas están igual que la original, con ese sabor, colorido y textura inconfundible que te transportarán a tierras transalpinas en casa bocado.
Cuando acompañas tu plato de pasta con salsa boloñesa, o tu pizza, la conjunción de esos sabores de la carne y el tomate hacen que estas recetas cobren vida. Y que tus comensales queden encantados con esta extraordinaria receta que bien merecería que te dieran una estrella Michelin…
5Preparar la base de la salsa boloñesa
Para comenzar con la receta de la salsa boloñesa, primero debes comenzar por pelar y lavar la cebolla, y luego proceder a picarla. Haz lo mismo con el apio. Debe estar cortado bien fino.
Una vez hecho, también debes continuar picando en cuadraditos la zanahoria. Recuerda que mientras más pequeños sean los trozos mejor, ya que no se van a triturar y debe quedar una textura agradable para la salsa.
Ahora debes cortar la panceta también en pequeños dados. Para ello necesitarás un buen cuchillo que esté bien afilado. O pedirle a tu carnicero que lo haga por ti.
También tienes que picar la panceta igual de pequeña, pero no la mezcles con la carne, ya que se usará en pasos diferentes.
El siguiente paso es poner una cazuela con un chorro de aceite de oliva virgen extra y añadir la panceta. Cocina a fuego lento durante unos 15 min para que suelte la grasa y se ponga crujiente. Una vez esté así, retira del fuego y reserva la panceta dorada en un cuenco.
Lo siguiente es saltear los vegetales en la grasa que ha dejado la panceta. Primero empieza por la cebolla, luego vendría el apio, y finalmente la zanahoria. Luego, agrega una pizca de sal y deja que se hagan unos 12 min a fuego medio.