A la hora de cursar el alta en el RETA una de las primeras cosas que hay que tener claras es cuál será el domicilio fiscal del autónomo. Sin embargo, se trata de un concepto sobre el que suele haber bastantes dudas. Y no debería haberlas, puesto que cualquier error al respecto puede dar lugar a una sanción por parte de Hacienda.
Es cierto que el domicilio fiscal se puede cambiar, pero lo mejor es que desde el principio se indique la dirección correcta a efectos de comunicaciones a la Agencia Tributaria. No hacerlo puede implicar que no te lleguen las notificaciones, con el consiguiente perjuicio para tus derechos que esto supone.
3Domicilio fiscal y domicilio social
En el caso de los autónomos societarios es importante que estos tengan en cuenta que domicilio fiscal y social no son lo mismo. El domicilio fiscal es el lugar en el que está centralizada la gestión administrativa, mientras que el domicilio social es el que consta en el Registro Mercantil y donde se celebran las juntas de socios.
Hay casos en los que la ubicación del domicilio fiscal y el social coinciden, pero no tiene que ser necesariamente así. Pero los expertos señalan que lo mejor es que ambas ubicaciones coincidan, ya que es una manera de evitarse problemas con Hacienda.