La «costumbre» de lavar los alimentos como los huevos o la carne es algo que se hace desde hace mucho tiempo. Como sucede con muchos otros temas, la ciencia ha demostrado que hay algunas enseñanzas antiguas que no son para nada recomendables por mucho que las vieses de pequeño.
Hay algunos alimentos que si los lavas los estropeas y otros que es necesario lavarlos por obligación para evitar cualquier tipo de intoxicación. Al igual que es importante conocer qué comida debes lavar y cuál no, también es imprescindible tener unos hábitos de higiene en uno mismo y en el entorno en el que se va a cocinar.
No debes olvidarte lavarte las manos antes y después de manipular alimentos crudos como la carne. Si no lo haces, te expones a la contaminación cruzada de alimentos.
A continuación, te diré los alimentos que NO debes lavar y sus motivos.
Carne cruda
La lógica te dice que la carne, como, por ejemplo, los filetes de cerdo o de ternera, debes lavarlos antes de cocinarlos. Pues no. Si los lavas, solo consigues eliminar los sabores y los nutrientes que trae la carne.
En el caso de la carne es mejor olvidarte del “poco hecho” y hacerla lo suficiente para que no puedas intoxicarte con ella. Además, no importa de qué animal provenga, no debes lavarla.
Si lavas la carne, aparte de eliminarle el sabor y las propiedades, puedes provocar que las bacterias que tiene por encima, que son inofensivas porque al cocinarlas mueren, se extiendan por todas partes de tu cocina y contamines otros alimentos sin darte cuenta.
Ensaladas en bolsa
Las bolsas de ensaladas, al igual que la carne o los huevos, son productos que se lavan por inercia en cuanto llegan a casa o vas a utilizarlos. Pues tampoco debes lavarlas.
Las ensaladas que vienen en bolsitas ya están más que lavadas para pasar los procesos de calidad y vienen listas para sacar del plástico a la mesa. Al contrario de lo que piensas, si las lavas por costumbre lo que logras es que se puedan contaminar en casa.
Otros alimentos que también vienen en bolsas y no hay que lavar son las espinacas, las acelgas y demás verduras de hojas verdes. En estos casos, en las fábricas las lavan con un producto especial para que no haya patógenos que las infecten.
Pescado crudo
A la mayoría de las pescaderías de los centros comerciales se les ha prohibido entregar el pescado que venden sin limpiar. Eso puede resultar un tanto engorroso y caro si el pescadero te quita medio pescado mientras lo limpia.
Esta nueva normativa se ha dado porque los peces pueden traer el temido anisakis y el peligro que conlleva su consumo o contaminación cruzada. Si no te lo han limpiado antes de traerlo a casa ten mucho cuidado a la hora de enjuagarlo y quitarle las tripas y ten muy restringida la zona de posible contaminación.
Si te lo dan limpio en la pescadería y aún así tiene restos de sangre puedes usar papel de cocina para limpiarlo, pero cuanta menos agua utilices mejor. Por si acaso además de evitar limpiarlo con agua también deberías congelarlo y así estar seguro de que lo que vas a comer no te va a enfermar.
Huevos
Esto puede ser que te resulte igual de extraño que lo de no lavar carne o pescado, los huevos NO SE LAVAN. Los huevos son de los alimentos que más intoxicaciones pueden llegar a provocar.
Si lavas el huevo, lo único que consigues es debilitar su cáscara. Esta sirve de barrera protectora para que no entren los microorganismos. No es recomendable lavar los huevos ni para guardarlos ni antes de cocinarlos.
Si coges un huevo y lo miras detenidamente, no es liso como una bola de bolos, tiene poros en plan pelota de golf. Esos poros van unidos a una cutícula impermeable que lo rodea y hacen que las bacterias y los gérmenes no entren.
Te diré algunas costumbres que tienes que anular de tu mente a la de ya con respecto al huevo:
- No puedes ensuciar lo de dentro con la cáscara de fuera.
- No uses la mitad de un huevo para separar la yema, ponla en un plato y pilla una botella limpia, presiona un poco acércate al huevo que hayas echado en el plato y deja de presionar la botella, la yema entrará sola sin contaminarla. Otra forma es usar un colador, pero tardas más, te aviso.
- Por último, esa costumbre de romper el huevo en la sartén o en el plato donde los vayas a batir y que se te caigan trozos de cáscara. Mal, hazlo en otro sitio y con cuidado.
Pasta
Hay personas que no lavan la carne o los huevos, pero, sin embargo, sí lavan la pasta tanto antes como después de haberla cocinado. MAL DE NUEVO.
La pasta es un alimento rico en almidón,que es uno de los motivos por los que se consume. Si la lavas antes de cocinarla lo que haces es eliminar parte de ese almidón que ibas a consumir.
Otro gran error que se comete con respecto a la pasta es lavarla DESPUÉS DE COCINARLA. No se debe lavar porque puedes contaminarla. Si no la lavas, consigues que las salsas se le adhieran mejor. Simplemente ponlas en el escurridor y añade un poco de aceite de oliva virgen extra para que se peguen entre sí o añade directamente el resto de los ingredientes.
Setas y champiñones
La micología es una ciencia muy bonita, pero a su vez peligrosa si no conoces bien los tipos de setas y de champiñones. Hay ciertos hábitos al comprarlos que hacen que puedan contaminarse y enfermarnos.
No se deben comprar y lavarlos para guardarlos o dejarlos en la misma bandeja en la que los adquieres. La humedad lo único que hace es que las bacterias campen a sus anchas.
Si están muy sucias debes quitarles la parte de arriba, lo que vienen siendo los sombreros, pero solo justo antes de cocinarlas. Si las lavas pierden gran parte de su aroma y de su sabor y cogen más agua de lo que deberían y al cocinarlas se nota la diferencia. Te diré cómo hacerlo:
- Tienes que pasarles un trapo un poco húmedo o un cepillo para quitarles la tierra que puedan traer.
- Elimina las zonas más dañadas o sucias con un cuchillo o quítales el sombrero directamente.
- La mejor forma de cocinarlas es escaldarlas en agua hirviendo si es que las vas a agregar a un guiso o saltearlas en la sartén.
- Recuerda NO COMER setas o champiñones que no estés seguro que son comestibles.
Pollo
Tan solo el 60% de las personas no lavan la carne de pollo cruda antes de cocinarla. Como te he dicho antes con respecto a la carne de cerdo, ternera y ovino, si la limpias bajo el grifo lo único que aumentas es la posibilidad de contaminación.
La forma de limpiar el pollo es con un trozo de papel de cocina y teniendo mucho cuidado con la sangre que pueden desprender.
La contaminación cruzada en el caso de la carne de pollo, al igual que pasa con el huevo, es muy fácil que suceda. Tienes que usar la tabla o el cuchillo tan solo para ese alimento, y una vez que acabes limpiarlos muy bien, al igual que la zona de trabajo donde lo hayas preparado.
El pollo es otra de las carnes que debes cocinar mucho y procurar que no quede cruda por ningún sitio. Una forma de hacerlo más rápido es hacerle unas rajitas profundas para que el calor penetre mejor en el alimento.
SÍ hay que lavar
Hay algunos alimentos que, al contrario de la carne o los huevos, tienes que lavar sí o sí.
- En el caso de los pescados que tengan tripas debes lavar bien las vísceras y eliminar las tripas con la precaución que te he dicho antes.
- Las frutas y las verduras que no vengan envasadas debes lavarlas si las vas a comer crudas o con piel.
- Las patatas crudas que hayas cortado o pelado tienes que lavarlas. Es una forma de eliminar parte del azúcar que tienen, en especial si las vas a freír.
- Al contrario que pasa con la pasta, en el caso del arroz sí es aconsejable que se lave antes para que se elimine el almidón que tiene adherido y para que el grano quede mucho más suelto.
- En las legumbres también debes lavarlas y ponerlas en remojo para que se pongan tiernas antes de cocinarlas, además, así evitas que te den los famosos gases de las habichuelas, por ejemplo.
