Si hay una razón por la cual el vino es conocido a nivel mundial, es por su buen sabor, sobre todo si está acompañado de una buena gastronomía. Si además le sumamos el hecho de que, siempre que se consuma de forma moderada, es muy saludable, no cabe duda de que no hay bebida mejor que esta. Hace siglos que se vienen estudiando los beneficios del vino, pues es una bebida presente en todas las mesas, y tiene grandes propiedades, que ya han sido comprobadas.
En general, es bueno para la salud, y puede prevenir y combatir ciertas enfermedades, siempre y cuando se consuma de forma moderada y responsable, es decir, una o dos copas al día como mucho. El abuso del alcohol es malo para la salud, y puedes lograr un efecto completamente contrario a los beneficios que podría aportarte. A continuación, conocerás por qué es bueno tomar una copa cada noche.
2Beber vino ayuda a quemar grasa
Para el cuerpo, tan solo representa consumo energético lo que es capaz de asimilar, transformas y procesar, es decir, los carbohidratos, las grasas y las proteínas. Pero el vino no contiene ni proteínas ni grasas. En lo que se refiere a su contenido en carbohidratos, se limita al azúcar, y no tiene ni dos calorías por copa.
Pero hay un buen detalle que conocer, el alcohol que tiene el vino ejerce un efecto calmante en el estómago, por lo que la sensación de hambre se ve atenuada durante una dieta hipocalórica. Esto ayuda a la digestión, además de generar un efecto termogénico al acelerar el metabolismo. Claro está, teniendo en cuenta que se está consumiendo de forma moderada. Resumiendo, en una copa de vino no hay apenas calorías asimilables, y se acelera el organismo de forma que favorece la quema de grasa. Pero cuidado con los vinos dulces, pues el aporte calórico es mayor.
