La falta de liquidez se ha convertido en uno de los problemas más graves que tienen que afrontar los autónomos en la actualidad. No es solo que su volumen de facturación haya descendido, es que, además, los niveles de morosidad han ascendido. Y esto pone a los profesionales por cuenta propia en una difícil situación económica que les puede llevar a tomar decisiones erróneas como dejar de pagar la cuota de la Seguridad Social.
Pero, de todas las decisiones que puede tomar un autónomo para intentar mantener su negocio en una situación tan complicada como la actual, dejar deudas pendientes con la Seguridad Social y con Hacienda es de las peores. Estas Administraciones van a aplicar recargos sobre la deuda principal, y también pueden adoptar otras medidas especialmente perjudiciales para los profesionales.
4No poder acceder a las ayudas de las Comunidades Autónomas
La situación actual es tan complicada que todas las Administraciones Públicas están poniendo de su parte para ayudar a autónomos y empresarios. Desde que comenzó la crisis sanitaria, la gran mayoría de las Comunidades Autónomas han aprobado diferentes planes de ayudas directas para los profesionales que trabajan en su territorio.
Si dejar de pagar la cuota de la Seguridad Social inhabilita al autónomo para acceder al cese de actividad, lo mismo ocurre con las ayudas aprobadas a nivel autonómico. Por eso, antes de optar por dejar la cotización sin pagar hay que pensárselo muy bien, porque con esta decisión puede que el autónomo se esté cerrando muchas puertas.