Masterchef ha lanzado la promoción de su próxima edición, que arrancará próximamente tras el final de Maestros de la costura. El programa de cocina es uno de los buques insignia de la cadena pública, que más allá del formato de anónimos habitual ha realizado también ediciones con los más pequeños y con personajes famosos. Tras una séptima edición algo descafeinada, en la última La1 recuperó a su público, con casi tres millones de espectadores de media y una cuota de pantalla superior al 20%. Sin embargo, en el fondo hay un temor: Arguiñano y Chicote, de alguna forma, podrían acabar con este programa.
5El problema de Masterchef
La posibilidad está ahí. Chicote ahora tiene mucho más tirón que antes y las ganas de ver a expertos de la cocina batirse en concurso apetece, según lo que puede leerse en las redes sociales. Si en Masterchef ha salido Carlos Maldonado con una estrella Michelin, en Top Chef esto es aún más frecuente. La primera ganadora, Begoña Rodrigo, recibió su primera distinción a finales de 2019. Los otros vencedores fueron David García, Marcel Ress y Rakel Cernicharo. Desde el 2017 no se ha vuelto a emitir ninguna edición, algo que también ayuda a generar más expectación.
Lo que es evidente es que Chicote tiene mucho tirón y quizás sea el momento de aprovecharlo, ahora que con el covid-19 ha paralizado por completo la posibilidad de grabar la octava temporada de ‘Pesadilla en la cocina’. Una jugada estratégica que pondría otro programa de cocina en el candelero televisivo y que podría perjudicar las futuras emisiones de Masterchef.