¿Quién no ha conseguido alguna vez hacer una tortilla francesa? Aparentemente, una de las recetas más sencillas y asequibles incluso para quienes se dan menos maña en los fogones. Sin embargo, siempre existe la posibilidad de mejorar nuestra forma de cocinar este delicioso manjar lleno de proteínas (y sin implicar complejas elaboraciones o sabores y rellenos demasiados innovadores). El truco para conseguir la tortilla francesa perfecta, jugosa y con el grosor adecuado, es más sencillo de lo que parece. Te lo revelamos a continuación.
Te estarás preguntando si acaso la receta de tortilla francesa no consiste en batir huevos, añadir un poco de sal, un poco de aceite y fuego suave para cuajar los huevos. En realidad, sí, es así, pero hay diferentes puntos de esta sencilla receta que harán la diferencia entre una tortilla y la tortilla perfecta. Este es el secreto de los grandes chefs.
5EL FUEGO, EL ÚLTIMO GRAN TOQUE DE LA TORTILLA PERFECTA JUGOSA
Antes de animaros definitivamente a probar los trucos para conseguir una tortilla francesa más jugosa, resta hablar de un elemento crucial: la potencia de fuego que vamos a usar para la cocción. Ya hemos hablado del tamaño de la sartén, pero no hemos incidido aún en la importancia de que sea una sartén tipo wok o al menos que tenga cierto fondo. La razón es utilizar las paredes de la misma para dar la forma adecuada a la tortilla mientras se hace. Para ello, siempre a fuego medio, tirando más incluso a suave o bajo. Que nos permita jugar con la tortilla antes de que se cuaje. Ayúdate con una paleta de madera para ir cerrando la tortilla sobre sí misma, y mantén la sartén en el fuego, inclinada hacia la zona en la que descansa.