Entramos en la época de Semana Santa, y aunque no se pueda celebrar como quisiéramos, la gastronomía y la tradición nos permiten hacerlo de la forma más cercana en la cocina. Hablamos, por supuesto, del riquísimo postre de los roscos fritos, una auténtica delicia típica andaluza que en estas fechas, Carnaval incluido, se preparan y se hacen muy vistosas.
Similares a las rosquillas fritas gallegas, aunque éstas se llevan a cabo durante todo el año, son una tradición muy recurrente junto a las torrijas y los pestiños. Así, podemos decir que forman parte de un triunvirato de postres de sartén. Muy populares, desde nuestro portal de MERCA2 te mostramos su receta para hacerlos en casa.
3Al batir los huevos con los ingredientes, la masa de los roscos fritos debe quedar para que se trabaje con las manos
En este sentido, para los roscos fritos habrá que empezar por batir los huevos al tiempo que se van echando todos los ingredientes, siempre batiendo cada vez que se incorpore alguno. Eso sí, algo importante: lo último que introduciremos será la harina.
Otro punto importante siguiendo el proceso de este postre típico andaluz, las abuelas nos dicen que la masa debe quedar para que se pueda trabajar con las manos. Pero también que se pegue un poco, por ello nos untaremos las manos con aceite (nos costará menos trabajo).
A continuación, y en lo que se refiere a la propia harina, si amasamos a mano en el bol como lo haría la abuela, con la mezcla anterior echaremos la harina poco a poco mezclando primero con un palo de madera y después pasamos a la mesa para amasar. Por otra parte, si tenemos amasadora, a ella habrá que ajustar sólo la harina necesaria hasta que se despegue de las manos.
