La crisis sanitaria y económica derivada de la pandemia de Covid-19 está pasando factura a la salud mental de los autónomos. Hasta tal punto que el número de profesionales dados de alta en el RETA que deciden buscar ayuda especializada a nivel psicológico ha crecido de forma importante en los últimos meses.
Fenómenos como la ansiedad, los episodios de estrés agudo, los problemas para conciliar el sueño o la sintomatología depresiva se han incrementado entre quienes trabajar por su propia cuenta. Si ser autónomo siempre es estresante, la situación se complica todavía más cuando hay circunstancias externas imposibles de controlar que pueden afectar de manera directa a la viabilidad del negocio.
2La salud mental de los autónomos ya estaba afectada antes
Es cierto que estamos en una situación especialmente complicada y eso nos afecta a todos a nivel psicológico. Pero los profesionales de la salud mental señalan que en el caso de los autónomos los problemas psicológicos no se derivan únicamente de la pandemia. De hecho, los episodios de estrés y ansiedad aguda son más frecuentes entre quienes trabajan por su propia cuenta que entre el resto de la población.
El autónomo tiene que hacer frente a innumerables problemas y situaciones difíciles cada día. Este tipo de profesionales ya estaban sometidos a mucha presión antes de que comenzara la pandemia, con horarios laborales que se alargan mucho más de lo debido y una mayor desatención de su salud a nivel físico y psicológico.