La plataforma de delivery holandés Just Eat Takeaway.com, registró en 2020 pérdidas de 151 millones de euros, lo que supone un incremento del 31% de los ‘números rojos’ de 115 millones contabilizados en 2019, según las cifras publicadas por la compañía, que multiplicó casi por cinco sus ingresos anuales, hasta 2.042 millones.
Sin tener en cuenta el impacto de elementos extraordinarios, el resultado bruto de explotación (Ebitda) ajustado de la multinacional en el conjunto del ejercicio alcanzó los 191 millones de euros, frente a los 12 millones correspondientes al ejercicio 2019.
Al contabilizar las cuentas como empresas combinadas de Just Eat y Takeaway para ajustar el impacto de la fusión completada a principios de 2020, los ingresos aumentaron un 54%, hasta 2.398 millones, mientras que el Ebitda ajustado se incrementó un 18%, hasta 256 millones.
En el conjunto del ejercicio, la plataforma procesó 588 millones de pedidos, un crecimiento anual del 42%, con un incremento del 51% del valor bruto de las órdenes y un incremento del 6,3% del importe medio de cada pedido, hasta los 22 euros.
Al cierre de 2020, el número de usuarios activos de Just Eat Takeaway era de 60 millones, lo que representa un crecimiento del 23%.
«2020 fue un año excepcional para Just Eat Takeaway.com», declaró Jitse Groen, consejero delegado de la compañía en referencia al impacto de la pandemia de Covid-19. En este sentido, el máximo ejecutivo de Just Eat Takeaway expresó su confianza en que la plataforma registrará una aceleración de los pedidos en 2021.
