En los últimos años la Seguridad Social ha puesto su particular lupa sobre los falsos autónomos, y muy especialmente en los conocidos como riders, los repartidores de empresas de delivery o reparto a domicilio de todo tipo de productos. Tras unos meses de lucha en los tribunales, los afectados por fin consiguieron que se reconociera que no eran realmente autónomos, sino que siempre deberían haber trabajado con asalariados.
La batalla judicial ha sido bastante larga porque las empresas afectadas no querían dar su brazo a torcer y han llevado el asunto ante el Tribunal Supremo a base de recursos. Ahora que el alto tribunal ha vuelto a dar la razón a los riders, es hora de que las empresas se pongan al día y paguen sus cotizaciones en el Régimen General de la Seguridad Social. Mientras tanto, los afectados van a recibir la devolución de las cuotas que pagaron cuando eran autónomos.
5La regularización de los falsos autónomos
Una vez que los tribunales han hecho su trabajo, ahora es momento de que la Seguridad Social se ponga al día. Para empezar, las empresas de delivery que han perdido los juicios tienen que hacer el alta de sus empleados en el Régimen General de la Seguridad Social y con efectos retroactivos. Esto significa que van a tener que pagar las cotizaciones de esos empleados desde la fecha en la que estos empezaron a prestar sus servicios.
Por otro lado, la Seguridad Social tiene ahora que devolver a los falsos autónomos todas las cotizaciones que estos pagaron al RETA en su momento. Un proceso que puede llevar algo de tiempo porque hay muchos afectados, pero que ya se ha puesto en marcha y que se espera finalizar en los próximos meses.