Hay muchas formas de emprender pero, sin lugar a dudas, el emprendedor a tiempo parcial está en una situación especialmente complicada. Porque tiene que atender a su trabajo por cuenta ajena y, además, sacar tiempo para dedicarlo a su propio proyecto profesional. Y aún así le tiene que sobrar algo de tiempo para conciliar con su vida personal.
Esto, que parece imposible, realmente no lo es tanto. Hay muchos ejemplos de personas que emprenden mientras están trabajando y consiguen sacar adelante su idea. Aunque es algo complicado, muchos prefieren hacerlo así para tener la seguridad de tener unos ingresos mensuales hasta que puedan dedicarse por completo a su negocio.
Vamos a ver algunos consejos sobre cómo hay que hacerlo para poner un negocio en marcha mientras tienes otro trabajo y conseguir llevarlo todo adelante con buen pie y sin sufrir un ataque de estrés por el camino.
5No hay que avanzar solo
Aunque tu proyecto sea tuyo, lo mejor es que no estés solo en tu aventura. Es importante que puedas contar con el apoyo de las personas de tu entorno, aunque esto no siempre es sencillo. En España hay muy poca mentalidad emprendedora y no todo el mundo entiende que alguien que ya tiene un empleo se plantee montar su propio negocio.
Con frecuencia, los emprendedores tienen miedo a enfrentarse a la opinión de quienes les rodean, y no quieren mostrarse débiles. Pero esto es un error, porque tu pareja, tus padres, tus hermanos o tus amigos pueden ser un gran apoyo. Incluso podrían darte ideas que no se te han pasado por la cabeza y hasta echarte una mano de vez en cuando en pequeñas tareas. Pedir ayuda es de valientes.