Si empezar un negocio ya es de por sí complicado, la cosa puede ponerse todavía más difícil cuando se trata de emprender en pareja. Porque los problemas del negocio pueden acabar convirtiéndose en problemas para la relación, y viceversa. A pesar de lo complejo que puede ser tener como socio a tu pareja, también es bonito crear un proyecto con la persona a la que quieres.
Emprender en compañía de tu pareja no tiene que ser necesariamente una experiencia negativa ni complicada, todo depende de cómo os planteáis las cosas y de que seáis capaces de separar a la perfección la vida personal de la vida profesional. Si quieres saber cómo hacerlo, presta atención a los siguientes consejos.
6Entender la comunicación como algo prioritario
Muchas veces conoces tan bien a tu pareja que consideras que no es necesario decirle ciertas cosas. Pero esto es un error, la comunicación debe ser la base tanto de la relación de pareja como de la relación profesional. Lo que queremos decir con esto es que nunca hay que dar nada por hecho.
Al emprender en pareja debemos desarrollar todavía un poco más la empatía hacia la otra persona y ponernos en su lugar antes de emitir una opinión o juzgarla. Hay que comunicarse, tanto para lo bueno como para lo malo. Esto quiere decir que si vemos algo que está mal y podría mejorarse debemos decírselo a la otra parte, pero también si vemos algo bueno debemos decírselo, para que nuestra pareja sepa que su aportación al proyecto es tan valiosa o más que la nuestra.
Con una buena comunicación, con el sentido común como bandera y mucho amor, emprender en pareja puede ser una de las experiencias más positivas de tu vida. Pero recuerda que es fundamental ser comprensivos y separar muy bien la faceta amorosa de la faceta profesional.