Si empezar un negocio ya es de por sí complicado, la cosa puede ponerse todavía más difícil cuando se trata de emprender en pareja. Porque los problemas del negocio pueden acabar convirtiéndose en problemas para la relación, y viceversa. A pesar de lo complejo que puede ser tener como socio a tu pareja, también es bonito crear un proyecto con la persona a la que quieres.
Emprender en compañía de tu pareja no tiene que ser necesariamente una experiencia negativa ni complicada, todo depende de cómo os planteáis las cosas y de que seáis capaces de separar a la perfección la vida personal de la vida profesional. Si quieres saber cómo hacerlo, presta atención a los siguientes consejos.
2Elaborar un presupuesto y ceñiros a él
Las finanzas de vuestro negocio deben estar separadas de vuestras finanzas personales. Antes de nada tenéis que decidir cuál va a ser el nivel de participación de cada uno de vosotros en vuestro negocio. No porque sea tu pareja el negocio debe pertenecer al 50% a cada uno. Puedes poner tú más dinero y encargarte de más cuestiones de gestión, o que sea tu pareja quien lo haga.
En cualquier caso, es fundamental elaborar un presupuesto inicial para el negocio y crear una cuenta solo para cuestiones relacionadas con vuestra vida profesional. En ella se ingresarán todos los beneficios del negocio y desde ella también se harán los pagos. Luego decidid cómo vais a repartir los beneficios, sin olvidar que una parte de lo ganado tiene que permanecer como patrimonio del negocio para hacer frente a posibles gastos.