Un total de ocho entidades financieras del Reino Unido han anunciado el traslado de algunas de sus operaciones o de su personal a Madrid, lo que sitúa a la capital española como quinta ciudad europea favorita para la reubicación de profesionales y activos a la Unión Europea tras el Brexit, según un análisis de EY Financial Services Brexit Tracker.
Desde el referéndum de 2016, el 40% de las entidades analizadas (89 de 222) han confirmado o anunciado realizar un traslado de profesionales o activos a una ciudad de los 27 países miembros, mientras que el 12% (27) han apuntado varias ubicaciones en el continente.
Entre las principales capitales, Dublín se mantiene como el destino más popular del sector financiero de Reino Unido, con un total de 36 entidades que la han seleccionado, seguido muy de cerca por Luxemburgo con 29. En tercer lugar, se sitúa Frankfurt, designada por 24 entidades y, en el cuarto, París con un total de 20.
Madrid comparte la quinta posición con Ámsterdam, que también ha sido elegida por ocho entidades, mientras que Bruselas y Milán cierran la lista con seis y cinco, respectivamente.
Además del traslado de operaciones, el análisis de EY también cifra el impacto en el empleo, con cerca de 7.600 puestos de trabajo que se han visto afectados desde el referéndum, una cifra que ha crecido en 1.000 empleados desde octubre de 2020.
LA MIGRACIÓN DE ACTIVOS PUEDE ALCANZAR LOS 1,5 BILLONES
En este proceso de recolocación, 24 de las mayores empresas de servicios financieros del país (diez bancos, nueve aseguradoras, y cinco gestoras de patrimonios y activos) han anunciado o confirmado su intención de transferir activos del Reino Unido a la Unión Europea debido al Brexit.
A pesar de que no todas las entidades han declarado públicamente el valor de los activos que podrían verse afectados, según el análisis de EY la cifra es de casi 1,3 billones de libras esterlinas (unos 1,5 billones de euros), frente a los 1,2 billones de libras (unos 1,39 billones de euros) que se preveían en octubre de 2020.
Las entidades están a la espera de los detalles del próximo Memorándum de Entendimiento sobre Servicios Financieros y, en breve, afrontarán una nueva ronda de negociaciones sobre el marco que definirá en última instancia la futura relación en este ámbito.
«Los desafíos siguen siendo significativos y existe el riesgo de fragmentación en el mercado, lo que generaría costes e ineficiencias para los usuarios de servicios financieros y sería potencialmente perjudicial para la competitividad tanto del Reino Unido como de la UE y sólo beneficiaría a Estados Unidos y Asia», ha explicado el socio responsable de Servicios Financieros de EY, Francisco Velasco.
EFECTO NEGATIVO EN LAS ENTIDADES FINANCIERAS
El 26% de las entidades del Reino Unido analizadas (57 de 222) han declarado públicamente que el Brexit está afectando o afectará negativamente a su negocio, frente a las 49 empresas que así lo reconocían en enero de 2020.
Desde finales de diciembre de 2020 y transcurridos dos meses desde el acuerdo del Brexit, diez empresas de servicios financieros –formadas por algunas de las mayores entidades bancarias, bancos de inversión y gestores de patrimonio y activos que operan en el país británico– han instado públicamente al Gobierno y a los reguladores del Reino Unido a garantizar las condiciones necesarias para que el sector siga siendo competitivo.
Las declaraciones públicas incluyen el deseo de que se cree un entorno operativo accesible tanto para el comercio local e internacional como para los servicios de negocio, empresas locales como internacionales de comercio y servicios.