La pandemia y los precios de la sosa han tenido efectos en los beneficios de Ercros. La compañía química ha cerrado el 2020 con unas ganancias de 6,318 millones de euros, un 78% inferior a las obtenidas en 2019. Sin embargo, la compañía presidida por Antonio Zabalza ha mantenido su plan de inversiones para este año.
Según ha afirmado Zalbaza, Ercros no repartirá dividendo a cuenta del ejercicio 2020 al no haberse cumplido uno de los tres requisitos. En este sentido, ha explicado que el beneficio por acción, de 0,06 euros, ha sido inferior al fijado en las condiciones (al menos 0,1 euros por título). «No se cumple una de las tres«, ha admitido durante la presentación de resultados. La empresa química sí ha alcanzado los objetivos en las otras dos, como los ratios de deuda/EBITDA, inferior al 2%. «No se dará dividendo a cuenta del ejercicio», ha insistido.
Debido a que la retribución al accionista es considerada un «punto muy importante«, Ercros realizará un programa de recompras de acciones a partir del 1 de marzo para compensar la pérdida de este dividendo. Estas operaciones se anotarán en las cuentas de 2021, un año de inicio de la recuperación, manteniendo la estela fijada en el último trimestre de 2020.
El máximo ejecutivo de la química ha recordado que entre 2016-2020 se han abonado 60,4 millones de euros a los propietarios de los títulos, de los que 21,2 millones corresponden a dividendos y 39,2 millones a recompra de acciones.
PLAN DE INVERSIÓN INTACTO
En cuanto a las inversiones, ha asegurado que tendrán un límite de 30 millones anuales, mientras que ha pedido ya los permisos de obra y licencias para las ampliaciones de las fábricas incluidas en su plan 3D. La inversión está en marcha», ha asegurado Zabalza a preguntas de este medio. «Aún estamos en fases preliminares y en las peticiones de solicitud de los fabricantes», ha indicado.
Por otro lado, considera que la pandemia está remitiendo, pero mantiene una postura prudente y paciente, para no adelantar acontecimientos.
Aún así, cree la «recuperación puede haber comenzado» en el cuarto trimestre del pasado año atendiendo a las cifras obtenidas en ese periodo, como una posición «muy sólida» de liquidez, con más de 72 millones de euros, y una situación financiera robusta, con una importante reducción de deuda. A corto plazo, la deuda ha caído un 76%, hasta los 21 millones.
Con estos datos, Zabalza ha apuntado que Ercros ha acusado el elevado precio de la sosa durante este 2021 debido a la ola de frío en Texas y Lousiana (EE UU), que ha paralizado la producción en la zona. Así, estiman que la recuperación de la actividad en estos dos estados mejorará de cara a marzo, aunque mantiene la cautela debido a los estragos del temporal.
MEJORA EN EL ÚLTIMO TRIMESTRE DEL AÑO
En cuanto a las cifras, Ercros ha reducido paulatinamente la brecha producida por la pandemia en los primeros trimestres de 2020 respecto al 2019. Fruto de la mejora contemplada en el último trimestre del año se observa una mejora del EBITDA respecto a las últimas previsiones de la compañía, dadas a mediados de noviembre del pasado año, junto con la reducción de deuda, de 110,2 a 84 millones en 2020. La caída del EBITDA ha sido del 18%.
En los últimos tres meses del año ha recuperado los niveles de toneladas previos a la pandemia, junto a la bajada de precios y volúmenes de venta se ha visto en gran medida compensada «por la reducción del precio de los aprovisionamientos y suministros» en un entorno «adverso».
El resultado de explotación ha caído un 50,7%, hasta los 13,247 millones, y el beneficio por acción ha bajado a 0,06 euros por título frente a los 0,28 registrados el pasado ejercicio. La posición de liquidez de Ercros se situó a cierre del 2020 en los 39,424 millones frente a los 60,5 de 2019.
El importe neto de las ventas ha descendido un 15%, hasta los 565,22 millones, mientras los gastos de explotación caen hasta los 180,08 millones. La compañía ha dotado provisiones por valor de 1,092 millones, un 166% más de los 410.000 euros del pasado ejercicio.
Los ingresos financieros han aumentado en un 72%, hasta los 1,277 millones, frente a los 740.000 euros del 2019; los gastos financieros, por otro lado, se reducen hasta los 5,294 millones.