
Tributar es algo totalmente necesario para que el Estado pueda hacer frente a todos sus gastos. Sin embargo, no es precisamente lo que más les gusta a los ciudadanos. Aunque la carga fiscal sobre los autónomos es elevada, muchas veces el desconocimiento sobre las normas tributarias puede acabar haciendo a estos profesionales pagar más impuestos de los que deberían.
Desde una falta de previsión a la hora de hacer la contabilidad hasta una incorrecta cumplimentación de los modelos trimestrales pueden acabar dar dando lugar a que el profesional dado de alta en el RETA tenga que pagar más impuestos de los que inicialmente le corresponderían. Si quieres que esto no te ocurra a ti, presta atención a los errores que vamos a ver a continuación e intenta evitarlos a toda costa.
4Una mala optimización de la declaración de la Renta implica pagar más impuestos

Igual que hay que hacer una buena planificación de los impuestos que hay que pagar cada trimestre, el autónomo también debería hacer una buena planificación de cara a la declaración del IRPF. Se trata aquí de tomar decisiones que puedan ayudar a ajustar al máximo las cifras para reducir el riesgo de tener que acabar pagando a Hacienda.
A media que se acerca el final del año se pueden tomar decisiones sobre la facturación de los proyectos pendientes. Para valorar si compensa facturarlos dentro del mismo o si es más conveniente incluirlos ya en el ejercicio siguiente facturándolos en enero. Y exactamente lo mismo ocurre con los gastos.
Además, si se ha hecho una buena planificación con tiempo suficiente, se pueden tomar decisiones como poner dinero en un plan de pensiones, hacer una donación o tomar alguna otra medida que implique un ahorro fiscal.