La amoxicilina, se caracteriza por ser un antibiótico de la familia de las penicilinas. Es un bactericida, es decir, que es perfecto porque sirve para destruir los microbios. Por tanto, es utilizado para tratar un número de infecciones que se producen por los gérmenes sensibles a este antibiótico.
Las infecciones más frecuentes que se pueden tratar con este antibiótico son amigdalitis, otitis, sinusitis, neumonías, infecciones como de orina, dentales y de piel. También es utilizado con la combinación de otros fármacos en el tratamiento para erradicar del estómago al Helicobacter pylori.
5Consejos para darle un buen uso a la amoxicilina
Estos son algunos consejos que se deben de tomar en cuenta para darle un buen uso a la amoxicilina:
- Deben de utilizarse solo cuando los médicos la prescriben. Tomando en consideración los intervalos entre tomas y durante los días que les indiquen.
- Nunca la amoxicilina se debe de utilizar para tratar un proceso vírico como un catarro o una gripe.
- No se debe tomar por su cuenta o por consejo de algún familiar o amigo.
- Si los envases prescritos tienen más de los medicamentos que los precisos para sus tratamientos. Lo ideal sería no guardarlo para otra vez, deseche el restante en los lugares apropiados.
- No tratar de conseguir la amoxicilina sin receta en las farmacias. Como los demás antibióticos, no se las podrá suministrar sin la correspondiente prescripción médica.
- Utilizar la amoxicilina, y los demás antibióticos, de una manera juiciosa.