La restauración en Madrid y Cataluña tienen dos versiones muy distintas de las devastadoras consecuencias de las decisiones políticas para tratar de frenar los contagios.
Madrid no sólo ha dado el ‘sorpasso’ económico a Cataluña durante el año del Covid-19, sino que se ha convertido en la «envidia», sana pero envidia al fin y al cabo, para la restauración debido a las «sangrantes y dramáticas restricciones» del Gobierno de Pere Aragonés (ERC).
Pese a los datos, Madrid registra una incidencia superior a Cataluña en los últimos 14 días, los comerciantes y restauradores de la Ciudad Condal consideran que «la Comunidad de Madrid no está mucho peor».
MADRID Y EL DIFÍCIL EQUILIBRIO ENTRE SALUD Y ECONOMÍA
«Madrid es la envidia. Ha conseguido el equilibrio entre luchar contra los contagios y la economía«, «en Cataluña estamos indignados. Así se han manifestado tanto Nuria Paricio, directora de Barcelona Oberta, y Roger Pallarols, director del Gremi de l’Restauració, en sendas conversaciones telefónicas a MERCA2.es.
Ambas asociaciones agrupan el 90% del tejido de la restauración, comercio y hostelería de Barcelona y han rechazado la «criminalización de estos sectores» por parte del Govern de la Generalitat. Hay que aprender de Madrid«, ha argumentado la directiva de Barcelona Oberta. «La situación es crítica y dramática» en Cataluña, ha lamentado Pallarols.
LLEGAR A FIN DE MES ES TAN IMPORTANTE COMO FRENAR CONTAGIOS
El establecimiento de medidas para mantener abiertos los bares y restaurantes, junto con una vigilancia extrema de la Policía Municipal en Madrid ha sido decisivo para ambos directivos. «Llegar a fin de mes es tan importante como frenar los contagios», ha destacado Pallarols.
«(Isabel Díaz) Ayuso ha demostrado un mayor acierto en las medidas desde mayo. El tiempo no le ha quitado la razón», ha rematado Pallerols, quien se ha desecho en elogios a la gestión de la presidenta de la Comunidad de Madrid. «La incidencia es similar a Cataluña«, ha continuado. No se trata de un debate entre salud y economía, sino de salvar ambas», ha destacado.
Cuando los centros comerciales han cerrado, la gente se apelotonaba en las calles», ha denunciado Paricio, quien ha pedido más espacio comercial para tratar de evitar las concentraciones de personas en puntos neurálgicos de la ciudad.
La directora de Barcelona Oberta ha negado que los focos de los contagios tengan lugar en restaurantes y comercios, en contra de la opinión de los gestores de la Generalitat.
«LAS RESTRICCIONES SON INSOPORTABLES»
Las decisiones sobre las restricciones son insoportables», en referencia al confinamiento municipal -ningún residente puede salir de su municipio si no es por causa justificada- y los horarios impuestos a la restauración, como abrir dos horas por la mañana y otras dos al mediodía, mientras desde la Generalitat se insiste a la población en mantenerse en sus casas.
A su juicio, las medidas impuestas por el Procicat, el encargado de comunicar las restricciones de movilidad durante el estado de alarma en Cataluña y dependiente del Departamento de Salud, no han tenido los resultados esperados. «Son discutibles», ha opinado la directora de Barcelona Oberta.
Por este motivo, ha reclamado que la Generalitat escuche al gremio para luchar contra los contagios sin dañar más la economía. «Madrid lo ha hecho«, ha afirmado. A su juicio, las ayudas directas, de hasta 6.000 euros a los establecimientos cerrados en Cataluña, son «tiritas», aunque es consciente de la falta de músculo financiero.
«No hay suficiente capital, al contrario que Alemania«, ha indicado. Además, añade a estos costes los efectos en la salud de estos empresarios: enfermedades mentales, depresión, sin encontrar una salida a esta situación.
EN CATALUÑA «SE HAN CARGADO LA ECONOMÍA»
El efecto más claro en Cataluña es que «se han cargado la economía. Solo en centros comerciales hay en vilo 70.000 empleos y numerosos bares y restaurantes de su interior han cerrado definitivamente», ha añadido Paricio.
Grandes grupos de la restauración con presencia internacional han mantenido abierto su negocio menos en Barcelona«, ha aclarado. Según sus propias encuestas, el 50% de la restauración en Barcelona está en riesgo de cierre total.
«El coste de la gestión en Cataluña con las restricciones será la de los cierres de empresas y la pérdida de miles de puestos de trabajo, y conllevará un mayor gasto social al Estado», ha resumido. También critica las medidas de movilidad del Ayuntamiento de Barcelona, en manos de Ada Colau (En Comú Podem) y Jaume Collboni (PSC), que buscan restringir la llegada de vehículos privados del Área Metropolitana de Barcelona.
LA VIABILIDAD, PRINCIPAL PREOCUPACIÓN EN BARCELONA
«Las grandes urbes han sufrido un mayor impacto debido a las restricciones de la movilidad», ha puntualizado Pallarols. «La actual crisis deja a una ciudad como Barcelona en una situación delicada, pero la situación se ha agravado por la forma de gestionar de la Generalitat», ha remarcado.
Según el directivo del Gremi de l’Restauració, la hostelería en Barcelona solo ha registrado un mes relativamente bueno durante el 2020, entre la última quincena de junio y la primera de julio. «Hemos operado con una mínima normalidad», ha apuntado. «Muchos negocios están analizando su viabilidad ante el incremento de las restricciones», ha argumentado Pallarols.
Así las cosas, han pedido a la Generalitat un «equilibrio entre el freno de los contagios y tratar de reactivar la economía». «Estamos prácticamente en la UCI. Es una situación de pobreza empresarial», ha atestiguado.
DE DAR COMIDA PARA 600 PERSONAS A CERRAR
Los problemas de insomnio y preocupaciones forman parte del día a día de Abel, un ejemplo más de la devastación por las restricciones. Este miembro de la plataforma PEACovid-19 (que ha demandado al Gobierno por las restricciones), el pasado año y antes de la pandemia reformó un conocido establecimiento cerca de Gurb (Barcelona) para convertirlo en discoteca. Antes, en sus comedores llegaban a dar de comer a 400 personas cada sábado, mientras el local tiene un aforo de 600 personas. El 2021 lo da prácticamente por terminado, mientras que espera que el 2022 pueda abrir y estrenar su nuevo local.
«Cada sábado facturábamos prácticamente el mismo dinero que el resto de la semana. Entonces empleaba a 12 personas y ahora solo quedan cuatro«, ha señalado en una conversación con MERCA2.es.
Desde el mes de octubre del pasado año ha recibido tan solo 1.500 euros en ayudas, mientras compañeros de profesión han percibido cerca de 10.000. «Tengo un gasto fijo de 6.000 euros al mes y el banco ha ofrecido una moratoria, en la que hay que pagar intereses», ha señalado. Desde que empezó se ha dedicado a realizar comidas en mesa y en la localidad cercana a Vic no hay apenas actividad. Casi todos los comensales venían de fuera para pasar un día por este pueblo turístico entre los catalanes por su castillo.
EL BALÓN DE OXÍGENO DE AYUSO
La situación en Madrid es muy diferente. Los bares están abiertos al público, con limitación de aforo. Un ejemplo de ello es el café musical Club Malasaña, abierto por Óscar Iglesias, miembro de PEACovid-19, un mes antes de la declaración del Estado de alarma.
«La diferencia entre Madrid y Cataluña es abismal«, ha considerado en una conversación telefónica con este medio. Ayuso ha dado seguridad a los establecimientos, en paralelo a las restricciones ha impuesto normas de sanidad en los locales abiertos al público.
En su caso, «es un sitio seguro»; las mesas tienen una separación de hasta tres metros, ha instalado filtros EPA para renovar el aire del interior, así como el uso obligatorio de guantes y EPIs, en su caso, para evitar contagios entre el personal, y por tanto entre los clientes.
Define las medidas de Ayuso como «un balón de oxígeno«. Si estuviera en Cataluña», lo tendría cerrado y habría perdido la inversión realizada hace un año. En Madrid, con una limitación horaria, ha podido facturar cuatro horas diarias y no se ha visto reducida a cero, como le hubiera pasado en la región del noreste de España. «En Cataluña sería imposible mantener a flote el negocio si las restricciones duran seis meses más», ha dicho. «Es una situación mortal para cualquier empresario. «Lo que está haciendo Ayuso es excepcional», ha resumido.
En opinión del también portavoz de una asociación de discotecas en Valencia, las restricciones y horarios a bares no ha impedido que algunos jóvenes mantengan reuniones en casas y hagan fiestas.