La comida rápida a pesar de sus riesgos es una opción extraordinaria para obtener masa muscular, convirtiéndose en una de las razones esenciales para que muchas personas deportistas luego de sus sesiones de entrenamiento decidan consumir aperitivos en cuento a comidas o bebidas que le proporcionen una buena fuente de calorías.
Después de practicar ejercicios físicos, los niveles de glucógeno se reducirán, con lo cual aparecerá la influencia del llamado “post-work out meal”, que se caracteriza por la presencia de hidratos de carbono de asimilación instantánea o simplemente por el suministro de proteínas.
4Fast food: ¿Vital para los entrenamientos cardiovasculares?
Básicamente, un entrenamiento cardiovascular con gran intensidad, hace que todos los carbohidratos almacenados en el cuerpo requieran de un puñado extra. Es decir, el cuerpo humano es capaa de almacenar alrededor de 500 gramos de glucógeno, esto tanto en hígado como en músculos. Los deportistas lo que necesitan es facilitarle al organismo hidratos de absorción instantánea.
En efecto, es posible beber una bebida deportiva, pero también es tranquilamente acertado acudir a un restaurante de comida rápida de tu preferencia, esto con la finalidad de restaurar hidratos. Las ricas y prohibidas patatas fritas van a ser compatibles con la dieta que escojas, aunque en ningún momento van a ser más beneficiosas que la quinoa o la batata.