La dirección de Ford Almussafes ha planteado este martes al comité de empresa un nuevo Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que supone paralizar la producción de vehículos durante 14 días completos entre febrero y marzo. Adicionalmente, 600 trabajadores se verían afectados el resto de días laborales en estos dos meses de forma rotativa, según han informado fuentes sindicales.
Así lo ha trasladado la empresa durante la comisión consultiva que se ha celebrado esta tarde para abordar el programa de producción de la factoría valenciana.
Según los sindicatos, la empresa ya tenía pensado plantear un ERTE, de unos 7 u 8 días, por la bajada de ventas en los principales mercado, pero con el problema de desabastecimiento de los semiconductores chinos que está afectando toda la industria automovilística en las últimas semanas ha creído necesario ampliar el expediente.
Con el ERTE que ahora plantea, la multinacional prevé bajar la producción de 1.600 a 1.300 unidades al día, de modo que dejaría producir unos 13.500 automóviles esos dos meses de febrero y marzo, apuntan los sindicatos.
En principio, la previsión es que durante febrero y marzo el sistema A trabaje solo a turno de mañana. Según los sindicatos, la empresa no sabe si va a solicitar la ampliación del ERTE actual o uno nuevo, a falta de conocer cómo queda la negociación a nivel estatal sobre la prórroga de los ERTE por Covid, que finalizan el 31 de enero, y que posiblemente se firme esta semana. Los pormenores se detallarán el próximo martes 26 de enero en una nueva reunión.
En cuanto a la planta de Motores, se convocará una reunión la próxima semana para analizar el alcance de esta situación.
REACCIONES SINDICALES
El presidente del comité de empresa y portavoz de UGT, Carlos Faubel, ha señalado que todavía hay que analizar cómo quedarán las rotaciones de los 600 trabajadores afectados por el ERTE los días laborales de febrero y marzo en los que no se paraliza por completo la producción, pero se ha mostrado dispuesto a asumir el expediente «siempre que se den las mismas condiciones de protección de los trabajadores que en los anteriores».
Faubel ha lamentado este nuevo «contratiempo» en la fábrica valenciana y, aunque admite que la situación «es dramática» en general, considera que es necesario proteger a la plantilla y que la empresa debe garantizar el complemento salarial.
Desde el STM se han mostrado «conscientes de la situación» y están dispuestos a firmar este ERTE, «siempre y cuando se aumente el complemento salarial por encima del 80% y la empresa abone las prestaciones por desempleo consumidas en caso de despido».
El sindicato admite que la situación «es complicada para todo el mundo», también para la mayoría del empresariado, pero quién sufre más en estas situaciones de crisis siempre son las trabajadoras y trabajadores. Por ello, teniendo en cuenta las ayudas y exenciones que está teniendo Ford, «la dirección ha de ser sensible y valorar a las mujeres y hombres que hacen de Almussafes la gran planta que es» subrayan desde STM.
Por su parte, CC.OO. ha expresado su «indignación» por este nuevo ERTE al tiempo que ha reivindicado que más allá de si firman o no este expediente, «hay que exigir a la empresa, a las administraciones y especialmente en el frente europeo, a través de su comité, los planes de futuro de la marca en España, antes de que el anuncio de Ford Europa y de su reestructuración sea tan desafortunada como la de Nissan en Barcelona.
Desde CGT han calificado de «vergonzoso» que el mismo día que se les reúne para iniciar la negociación de un ERTE, se esté programando producción en horas extras para esta misma noche, precisamente en el sistema A.
