Siempre se ha considerado que en España existe déficit de autónomos, porque en un país que siempre tiene una elevada tasa de paro (especialmente entre ciertos colectivos), no es demasiado elevado el número de personas que deciden ponerse al frente de su propio negocio.
Si la situación ya es complicada en condiciones normales, todo lo vivido durante 2020 hace que no nos extrañe que haya sido un año especialmente duro para el autoempleo. De los datos oficiales se desprende que en los últimos meses se han dado de baja más personas del RETA de las que se han dado de alta.
5El déficit de autónomos no es nada nuevo
Lo cierto es que el fenómeno de que se produzcan más bajas que altas en el RETA no es nada nuevo. Las asociaciones de autónomos llevan años denunciando que para muchos profesionales es muy complicado mantener su actividad por el elevado número de gastos a los que tienen que hacer frente.
La situación se complica todavía más cuando llega una crisis económica como la que estamos viviendo. La anterior crisis de 2012 demostró que la destrucción de empleo no solo se da en el ámbito empresarial. A medida que aumenta el paro los consumidores contienen el gasto y esto lleva a muchos autónomos que están al frente de pequeños negocios a tener que tomar la decisión de cerrar.