Llevamos casi un año inmersos en una terrible crisis, primero sanitaria, y después económica. A los problemas que arrastramos se suman los gastos de las Navidades y una subida de la luz en plena ola de frío que aún nos lo va a poner todo más complicado. Así que, ahora más que nunca, conviene hacer malabarismos para conseguir gestionar de manera óptima nuestros recursos y suprimir los gastos prescindibles para llegar a fin de mes con un pelín más de holgura. Si lo hacemos bien, podemos ahorrar poco a poco, e ir creando un pequeño colchón de seguridad para imprevistos. El problema es que muchas personas no son capaces de llevar un adecuado control de sus finanzas y al final se encuentran en números rojos sin tener del todo claro en qué se les ha ido el dinero.
6¿FUNCIONA EL MÉTODO KAKEBO?
Todo dependerá de lo constante y minucioso que se sea. Para ser plenamente consciente de la forma en la que gastamos nuestro dinero, es importante registrarlo todo durante un tiempo determinado. El método en realidad es muy sencillo y se basa simplemente en el control de los gastos y en el sentido común. Lo único que hay que hacer es tomar un cuaderno y distribuirlo según las secciones correspondientes. En internet se pueden encontrar opciones para imprimir y crear nuestra propia agenda Kakebo. También existen multitud de aplicaciones para llevar este mismo control de gastos en nuestro smartphone, aunque muchas personas recomiendan el hábito de anotar cada entrada por escrito, mejor que a través de una pantalla.