Llevamos casi un año inmersos en una terrible crisis, primero sanitaria, y después económica. A los problemas que arrastramos se suman los gastos de las Navidades y una subida de la luz en plena ola de frío que aún nos lo va a poner todo más complicado. Así que, ahora más que nunca, conviene hacer malabarismos para conseguir gestionar de manera óptima nuestros recursos y suprimir los gastos prescindibles para llegar a fin de mes con un pelín más de holgura. Si lo hacemos bien, podemos ahorrar poco a poco, e ir creando un pequeño colchón de seguridad para imprevistos. El problema es que muchas personas no son capaces de llevar un adecuado control de sus finanzas y al final se encuentran en números rojos sin tener del todo claro en qué se les ha ido el dinero.
4ESTABLECER METAS
El sistema Kakebo propone, además de mantener todos los ingresos y los gastos perfectamente registrados, fijarse un objetivo para el ahorro, que se convertirá en la meta que tratemos de alcanzar. En este punto es importante ser realista, algo que puede ser difícil el primer mes para las personas que nunca han llevado un control tan exhaustivo de sus cuentas. No importan que los objetivos sean grandes o pequeños, la idea es que podamos cumplirlos.