La pandemia ha cambiado muchas de las cosas que se hacían habitualmente. Como la forma en la que se trabaja o estudia, fomentando el teletrabajo o la educación a distancia. Pero también ha cambiado la manera en que se hace ejercicio. El gimnasio, aunque se han implementado medidas de seguridad, puede que no sea una opción durante los confinamientos, toques de queda, etc.
Además, alguna gente es algo más aprensiva, y tiene miedo de ir a lugares cerrados donde hay más personas. Por eso, es probable que te hayas planteado dedicar alguna de las habitaciones de tu hogar para montarte tu propio gimnasio particular. Eso también te puede animar a hacer ejercicio, ya que reducirá tu pereza a la hora de salir en estos meses de invierno…
2El espacio adecuado
Lo más importante de todo es tener una habitación o espacio adecuado para montar tu propio gimnasio en casa. De lo contrario, todo el resto de equipamiento estará sobrando.
Muchas viviendas son bastante pequeñas, lo que dificulta las cosas. Pero es vital contar con algún espacio dedicado exclusivamente al gimnasio. Ya sea una pequeña habitación vacía, el garaje, o un trastero.
No debes usar habitaciones para usos múltiples, ya que, por un lado las máquinas te estorbarán para hacer el resto de tareas. Y si las tienes guardadas o plegadas caerás en el problema de la pereza de montar y desmontar todo cada vez que quieres hacer ejercicio…
Un porche, jardín o terraza también podría ser una buena opción, aunque es mejor algo interior, para que te pueda servir también durante los meses de invierno.
