Desde hace un par de semanas el uso de mascarilla es obligatorio en la mayoría de los espacios públicos. Es la mejor medida, junto con el lavado de manos, para disminuir al máximo las probabilidades de contagio de covid-19. Así que hoy día se trata de un complemento esencial en nuestro día a día que, efectivamente, protege nuestra salud, pero no pasa lo mismo con nuestro bolsillo, sobre todo porque la mayoría de las mascarillas no son reutilizables más allá de 8 horas. Así que, si vamos sumando, una familia de tres o cuatro personas se puede dejar una buena cantidad mensual de dinero en mascarillas.
5CON LEJÍA
La lejía es un producto peligroso, así que este tipo de desinfección no es el más indicado para personas más sensibles. Por una parte se puede introducir la mascarilla en una mezcla de lejía diluida en agua tibia en una proporción de 1:50 y dejar remojando 30 minutos. Después hay que lavarla muy bien para eliminar restos. Este método posiblemente estropeará un poco los filtros y esto es algo que debemos tener en cuenta. Otra forma de hacerlo es pasar tres veces un paño humedecido en lejía. Este método no daña los filtros pero no se recomienda en absoluto para personas con problemas como asma.
