Una de las cualidades que ayudan a identificar a un buen emprendedor es que tiene buen olfato para detectar oportunidades de negocio. Esta es una habilidad que algunas personas tienen de forma innata pero, sino es tu caso, no te preocupes, porque también puedes desarrollarla.
La clave está en tener muy claro qué es una oportunidad de negocio y qué no, y también tenemos que saber dónde buscarlas. Pero no nos vamos a quedar aquí, porque de nada sirve encontrar una buena oportunidad si no la aprovechamos. Por eso, una vez que la hayas detectado, es hora de pasar a la acción y comenzar tu plan de emprendimiento.
3Escuchando a tu público
No solo se buscan oportunidades de negocio cuando se está pensando en emprender, también es bueno estar a la caza de las mismas cuando ya se tiene un negocio en marcha, así evitamos que el mismo se pueda quedar estancado. Y lo bueno es que en este caso obtener la información te resultará más fácil.
Lo único que tienes que hacer es prestar atención tanto a tus clientes como a tu público potencial. A través de estudios de mercado elaborados por organismos públicos o privados, e incluso de las redes sociales y los blogs especializados, puedes detectar una necesidad que no ha sido bien cubierta.