Una de las cualidades que ayudan a identificar a un buen emprendedor es que tiene buen olfato para detectar oportunidades de negocio. Esta es una habilidad que algunas personas tienen de forma innata pero, sino es tu caso, no te preocupes, porque también puedes desarrollarla.
La clave está en tener muy claro qué es una oportunidad de negocio y qué no, y también tenemos que saber dónde buscarlas. Pero no nos vamos a quedar aquí, porque de nada sirve encontrar una buena oportunidad si no la aprovechamos. Por eso, una vez que la hayas detectado, es hora de pasar a la acción y comenzar tu plan de emprendimiento.
2Buscando clientes descontentos en un determinado sector
Para un emprendedor encontrar un mercado océano azul casi sin competencia es muy complicado, salvo que sea una persona con una gran tendencia hacia la innovación y dispuesta a asumir el riesgo. La mayoría de los emprendedores se sienten más seguros entrando en sectores con competencia, pero que han demostrado que pueden ser rentables.
Si quieres destacar entre la competencia, debes buscar buenas oportunidades de mercado. La mejor forma de hacerlo es haciendo un análisis en profundidad del sector y viendo las razones por las que los consumidores que operan en él están descontentos. Puede que necesiten un producto o servicio que nadie esté ofreciendo, o que lo que está en el mercado no termine de satisfacer del todo sus necesidades. Una vez que has encontrado esa oportunidad, tienes que buscar formas de sacarle partido.