La IA, o inteligencia artificial, cada vez tiene mayores capacidades, desde cocinar como demostró IBM Watson, hasta buscar fármacos y vacunas como se hace ahora para el SARS-CoV-2, hasta diagnosticar enfermedades, como asistentes, e incluso componer música…
Estos algoritmos implementados por software y/o hardware, cada vez sorprenden más. Las redes neuronales artificiales hacen ya cosas increíbles y se avanza a pasos agigantados. En parte gracias a multitud de apps y servicios que nutren a esos algoritmos para que aprendan. Por ejemplo, algunas apps que te cambian de sexo o te muestran cómo serías de mayor, simplemente están nutriendo a los algoritmos de caras para que aprendan a diferenciarlas, igual que las imágenes y vídeos que se suben a redes sociales, etc.
3IA como una oportunidad de futuro
La inteligencia artificial no solo es destructora de empleos, también puede generar bastantes puestos de trabajo y riqueza. De hecho, ya lo está haciendo.
Tener habilidades como programador o diseñador de sistemas de IA puede ser una garantía de conseguir un buen puesto de trabajo en la actualidad.
Además, la expansión de la IA generará nuevos puestos de trabajo en el futuro y que ahora no existen.