Noviembre no ha sido un mal mes para la cadena de supermercados alemana. Lidl ha conseguido posicionar diez de sus productos entre los más vendidos. Una lista que ha batido récords en este periodo. Artículos que han conseguido enloquecer a los compradores con una extraña fiebre adquisidora.
Y la causa de ese extraño «mal» han sido los precios, las calidades de los productos, su exclusividad, y ese fenómeno de masas que generan estas tiendas…