El lanzamiento en Estados Unidos de Amazon Pharmacy, la farmacia online del gigante del retail que incluye la venta de medicamentos con receta, puede poner en jaque la farmacia española y ha obligado a la distribución farmacéutica a acelerar sus planes de digitalización y poner a punto sus proyectos de farmacia online para hacer frente a los ‘peligros’ de la llegada del nuevo servicio de Amazon en España, así como a las necesidades que el nuevo consumidor demanda.
Aunque de momento el anuncio de Amazon Pharmacy limita el servicio al mercado estadounidense, puede ser cuestión de tiempo que se vaya implantando en otros países. De hecho, según ha anunciado la compañía tiene previsto para 2022 que Amazon Pharmacy entre en funcionamiento también en Europa.
Los grandes de la distribución farmacéutica, las cooperativas Cofares, Bidafarma y Grupo Hefame, ya hace tiempo que vienen trabajando en sus proyectos de farmacia online a través de sus plataformas, Welnia, Sensafarma y Fmasonline respectivamente, que incluyen servicios de e-commerce y otros servicios farmacéuticos.
Desde Grupo Hefame recuerdan que “en España solo está autorizada la venta por Internet de medicamentos publicitarios a través de las oficinas de farmacia, garantizando siempre un modelo y un producto que pase por las manos de los profesionales farmacéuticos”.
En Cofares destacan en la misma línea que a día de hoy «la venta de los medicamentos está regulada para garantizar que llegan al paciente en óptimas condiciones. Cofares siempre estará al lado de la oficina de farmacia, un agente esencial en la seguridad y la salud del paciente».
LEGISLACIÓN ADAPTADA
Aunque la legislación vigente europea impide actualmente la comercialización online de medicamentos con receta, puede ser cuestión de tiempo que se establezca la fórmula que finalmente lo permita. De este modo, las oficinas de farmacia recibirían un duro revés, ante el hecho de quedarse al margen de la venta de fármacos con receta y con pocas posibilidades de competir con un gigante del tamaño de Amazon, tal y como está ocurriendo ya a establecimientos de otros sectores.
Ante esta situación, las grandes operadoras de la distribución farmacéutica han acelerado sus planes de farmacia online a través de sus propias plataformas, como prácticamente única vía de evitar que el negocio salga fuera del ámbito del farmacéutico. Las distribuidoras inciden en que a través de sus sistemas todo el proceso, desde la compra en origen hasta la entrega al paciente, es una cadena controlada por las autoridades, lo que conlleva que sea imposible la falsificación. El tiempo de entrega de la distribución farmacéutica soluciona la demanda de los pacientes en horas y no en días como el modelo de Amazon.
El mercado farmacéutico es de gran interés para una plataforma como Amazon, teniendo en cuenta que, según la organización de investigación IQVIA, la venta online de productos de farmacia en España generó 187,3 millones de euros el año pasado, lo que supone un aumento del 54% respecto a 2018.