Hacerse una herida siempre es algo desagradable. Además, aunque sea leve, suele ser molesta en ciertos momentos, como cuando te duchas, cuando tienes que usar la parte del cuerpo donde está situada dicha herida, cuando te golpeas en ella y se vuelve a abrir, etc. Pero hay algunos trucos que pueden acelerar la cicatrización.
Siguiendo unos sencillos consejos de higiene, y tratamiento, podrás decir adiós a esas molestas heridas y que curen sin riesgo de infectarse. Y recuerda: ¡Cuídate! Solo hay «un tú».
5Mantén la herida elevada
Si la herida está inflamada tras pasar 1 o 2 días desde que te la hiciste, entonces deberías mantener la zona del cuerpo donde esté elevada. Este tipo de hinchazón suele ser común especialmente en personas con problemas cardíacos o de circulación, en especial en las heridas de las piernas.
Eso facilita que se reduzca la cantidad de líquidos acumulados en la zona y facilita la circulación de la sangre.
La elevación correcta sería unos 20 cm por encima del nivel del corazón. Y repetir el proceso durante 3 veces al día, o siempre que te sea posible.