Cuando vamos a poner en marcha un negocio son muchas las cosas que debemos tener en cuenta, pero una de las primeras dudas que debemos despejar es si nuestra idea es viable. ¿Quieren los consumidores comprar el producto o servicio que les vamos a ofrecer? ¿A qué precio están dispuestos a hacerlo? Para resolver estas incógnitas podemos recurrir al estudio de mercado.
Aunque hay especialistas en hacer este tipo de análisis, si estás emprendiendo o ya llevas tiempo como autónomo y quieres lanzar un producto o servicio es posible que no tengas recursos económicos suficientes como para pagar a un experto. No te preocupes, vamos a explicarte cómo puedes hacer tú mismo un análisis de este tipo.
7¿Y si el resultado del estudio de mercado no es positivo?
Puede ocurrir que después de todo el trabajo y esfuerzo realizado llegues a la conclusión de que tu idea no es tan viable como pensabas. Entonces tienes dos opciones, puedes dejar de lado tu proyecto y centrarte en cualquier otra cosa, o bien puedes hacer algunos ajustes en tu idea inicial.
Es posible que el servicio que quieres ofrecer no sea relevante, innovador y competitivo, pero podría llegar a serlo si haces algunos ajustes en el mismo. O quizá lo que quieres vender no tiene mucha demanda en tu localidad de residencia, pero sí podría interesar en una gran ciudad.
Lo que queremos decirte con esto es que un estudio de mercado nunca es en vano. Incluso puede ocurrir que al realizarlo descubras que tu idea no es viable pero a la vez los datos obtenidos te hagan darte cuenta de que hay una necesidad en el mercado en la que no habías caído y que ahora mismo no está siendo cubierta. Por tanto, no cometas el error de obviar este paso, es vital en tu futuro como emprendedor.