El mercado esperaba con ansia la renovación del Plan Estratégico de Endesa para saber cómo afrontaba la eléctrica su futuro inmediato, 2021-23, y, del mismo modo, cuál era su hoja de ruta para próxima década. En este sentido, lo más destacado para los próximos años es la inversión directa de 3.800 M€ en materia renovable. A largo plazo, la inversión total del plan se eleva a 25.000 M€.
En concreto, según el plan presentado por la compañía que dirige José Bogas, Endesa prevé unas inversiones de 25.000 millones entre 2021 y 2030 para aprovechar las oportunidades derivadas tanto del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), la ‘hoja de ruta’ del Gobierno para abordar la transición energética en la próxima década, así como de los fondos para la recuperación poscovid que llegarán de la Unión Europea, según la visión a 2030 para la compañía presentada como novedad dentro de la actualización de su plan estratégico 2021-2023.
En materia energética, Endesa prevé igualmente acelerar todavía más en el cierre del carbón, en línea con su matriz Enel, y habrá cesado completamente todas sus operaciones de generación con esta tecnología, dentro y fuera de la Península Ibérica, en 2027.
Dentro su plan estratégico para el periodo 2021-2023, Endesa aumentará un 25% el volumen de sus inversiones para los próximos tres años, en relación al plan estratégico 2020-2022, hasta alcanzar los 7.900 millones de euros.
De esta cifra, 3.300 millones estarán destinados a incrementar el parque generador de energía renovable, una cifra que es un 20% más elevada que en el plan precedente. Con esta inversión, la empresa alcanzará los 11.500 MW solares, eólicos e hidráulicos a final de 2023. Es decir, en torno a un 50% más respecto a los 7.700 MW con que concluirá el presente ejercicio 2020.
LOS NÚMEROS DE ENDESA
En lo que respecta a las cifras financieras, la energética prevé incrementar su beneficio bruto (Ebitda) un 10% en el periodo, desde los 3.900 millones estimados para 2020 hasta los 4.300 millones de euros en 2023 como fruto de ese aumento de la inversión del 25% hasta 7.900 millones.
En concreto, Enel Green Power España, la filial de renovables de Endesa, doblará su aportación al Ebitda desde 300 millones a 600 millones entre 2020 y 2023. Otros 100 millones adicionales de Ebitda procederán del negocio de distribución, que pasará de un beneficio bruto de 2.000 millones a 2.100 millones.
Por su parte, prevé que su resultado neto pase de los 1.700 millones estimados en 2020 a los 1.900 millones de euros a cierre de 2023, con un alza del 12% en el periodo.
A LA ESPERA DEL DIVIDENDO
Endesa prevé repartir unos 5.950 millones de euros en dividendos entre sus accionistas en el periodo 2020-2023, a pesar de que el grupo extenderá su política de un ‘pay out’ al 70% al último ejercicio del periodo para adaptarla al perfil de crecimiento impulsado por el grupo con un plan que prevé inversiones por 25.000 millones de euros en la próxima década.
De esta manera, la energética reafirma el giro en la política de dividendos que dio hace un par de años con respecto a la que mantenía hasta entonces, que recogía para todos sus ejercicios un ‘pay out’ del 100%. Esta se mantendrá en 2020, pero ya a partir de 2021 se recortará hasta el 80% y en 2022 y 2023 bajará hasta ese 70%.