Desde hace un par de años, hemos visto que en los refrigerados de los supermercados, junto a los yogures, aparece un nuevo producto que hasta hace poco desconocíamos. Se trata de kéfir, un producto probiótico de leche fermentada a medio camino entre el yogur y la cuajada. A pesar de que su origen es milenario, especialmente en los países próximos al Cáucaso, de donde procede, en nuestro país su consumo ha surgido hace relativamente poco. Sin embargo, parece que lo ha hecho para quedarse, entre otras cosas porque tiene más beneficios nutricionales que los yogures. Pero es que además se puede hacer con mucha facilidad. Te contamos todo sobre la bebida estrella.
1¿Qué es el kéfir?
Pero ¿qué es exactamente el kéfir? El kéfir es un lácteo que ha fermentado dos veces; una por acción bacteriana y otra por levaduras. Es un probiótico de leche fermentada parecido al yogur pero con más beneficios incluso que este y más líquido. Es ideal porque nos ayuda a restablecer nuestra flora intestinal, mejora nuestra digestión y las defensas. Además, es muy bueno para las personas que tienen alergia a la proteína de la vaca, puesto que el kéfir se puede hacer a partir de cualquier leche vegetal y así evitar estas molestias.