Está claro que la lasaña es una de las recetas más ricas que podemos hacer, por no hablar de que es realmente sencilla. El problema está en el uso del horno, pues hay quienes no tienen, y quienes prefieren ahorrarse semejante gasto de luz.
No por ello vas a tener que renunciar a una buena lasaña casera. Aunque te parezca mentira, la puedes hacer perfectamente sin horno, y queda igualmente deliciosa. A continuación, te damos todos los pasos que debes seguir para tener la mejor lasaña, con la que dejarás a todos tus comensales de piedra.
4Así se hace la salsa
Llega el momento de preparar la salsa de la lasaña de carne sin horno. Pon una sartén a fuego fuerte sin aceite con el bacon cortado en pequeños cubos. Cocina durante dos minutos hasta que veas que está dorado y retira el bacon dejando la grasa que ha soltado en la sartén. Ahora baja la potencia del fuego y añade la cebolla, el apio y la zanahoria bien picados. Toca salpimentar y remover constantemente con la cuchara de madera durante diez minutos.
Pasado este tiempo, hay que añadir la carne picada, mezclamos dos tipos para que el resultado sea más jugoso. Salpimienta y mezcla con la verdura mientras la vamos separando con la cuchara para que no haya mazacotes. Cocina durante dos o tres minutos, hasta que veas que desapareció el color crudo.
Ahora añade el tomate triturado y deja cocinar durante cinco minutos más. Pasado el tiempo añade el vino y la leche, un truco de las abuelas italianas. Introduce también el orégano, el perejil fresco picado y el romero. Introduce el bacon que tenías reservado y remueve para que se integren todos los ingredientes. Ahora deja cocinar durante 40 minutos.