La protección de datos es un tema que interesa por igual a empresas y autónomos. Aunque es una cuestión compleja, es fundamental cumplir las prescripciones legales en esta materia, ya que no hacerlo podría dar lugar a una importante sanción por parte de la Agencia Española de Protección de Datos. Además, mantener la información a salvo de terceros es fundamental para garantizar la viabilidad de un negocio.
Las empresas actuales operan en un entorno con una alta competitividad, por lo que no es extraño que haya intentos de entrada en sus sistemas informáticos para hacerse con su información más confidencial, ya sea para venderla a otra empresa o para pedir un rescate por ella. Por eso, en esta ocasión vamos a ver algunos aspectos básicos de seguridad que todo negocio debería aplicar.
4No al uso de contraseñas sencillas en un negocio
Cuando algo se protege a través de contraseña el objetivo es dificultar la entrada de terceros ajenos a la información protegida, pero si la contraseña es demasiado fácil para el hacker acceder a los datos será tan sencillo como darse un paseo por el parque. De ahí la necesidad de no usar contraseñas sencillas a nivel particular y mucho menos en un negocio.
Lo mejor es usar una contraseña que combine números, letras, mayúsculas, minúsculas y algún símbolo. Por supuesto, no debemos usar la misma contraseña en diferentes sitios y es conveniente cambiarla periódicamente. Solo así podemos estar seguros de que la información está bien protegida.