La morosidad es un tema que preocupa mucho a los autónomos pero con el que están acostumbrados a vivir, porque el riesgo de impago siempre está ahí. Los profesionales pueden adoptar medidas para intentar evitar que sus facturas se queden sin pagar, pero la estadística nos demuestra que todos los autónomos van a quedarse sin cobrar en algún momento de su vida profesional.
Para el autónomo la morosidad supone un problema a gran escala. No es solo que se quede sin cobrar por un producto o un servicio en el que ha puesto su esfuerzo y al que ha dedicado horas. Es que, si no cobra, él mismo puede acabar convirtiéndose en un moroso, porque su actividad también le genera gastos a los que debe hacer frente. Y ahora que estamos en plena crisis, hay que tener todavía más precaución, puesto que hay sectores que lo están pasando especialmente mal y en los que existe un mayor riesgo de impago. Veamos cuáles son.
2El sector de la automoción también se resiente
El sector de la automoción tiene una gran capacidad de generación de empleo y riqueza. Porque no solo se nutre de empresas automovilísticas, también de empresas auxiliares que fabrican piezas, se encargan de las tapicerías, etc. y muchos de esos negocios están en manos de autónomos que ya están siendo testigos directos de la crisis que está afectando a este sector.
Todavía no ha acabado el año y la previsión de caídas en el sector de la automoción ya se estima en un 35% en comparación con el año anterior. No es solo que los ciudadanos hayan decidido ahorrar y no comprar coches nuevos, es que además los vehículos ya no son tan imprescindibles ahora que la movilidad está muy reducida. Con las empresas del sector de la automoción en apuros económicos, el riesgo de impago para los autónomos que operan en este sector se está elevando mucho.