La salsa mayonesa o mahonesa, si hacemos honor a su origen balear, puede ser tan saludable como cualquier otra receta casera siempre y cuando cuidemos los ingredientes en su elaboración. Aunque existe la creencia de que la mahonesa es una bomba de calorías, si la elaboras siguiendo estos pasos y consejos, podrás disfrutar de una mayonesa light casera tan a menudo como el plato lo requiera o tu estómago te lo pida. Eso sí, si optas por comprar la mayonesa preparada, el efecto ‘saludable’ se evaporará. No obstante, dado el aporte calórico que incluso esta receta de mayonesa baja en grasas suma, consúmela con moderación.
La receta tradicional, de por sí, es saludable, puesto que no lleva nada más que huevo, aove y una pizca de sal. La versión que vamos a explicar a continuación de mahonesa baja en grasa imita el sabor y la textura real de la común, pero con muchas menos calorías, ideal para ensaladas y para platos de verduras o arroces.
5CÓMO CONSERVAR LA MAHONESA CASERA LIGHT
¿Cuánto tiempo puede pasar desde que hacemos nuestra receta de mayonesa casera hasta que la consumimos? En cualquiera de las versiones que hemos explicado, lo ideal sería tomarla ese mismo día. Las mayonesas de tarro ya cocinadas incluyen algunos conservantes que nos permiten tenerla abierta más tiempo sin que por ello se corte o cree peligro. En el caso de la mayonesa casera lo recomendable es no dejarla más de 24 horas después de hecha, aunque puedes conseguir alargar su vida dos o tres días más.
Para ello, lo más importante es que este proceso que os vamos a explicar sea inmediato. Se debe introducir en un recipiente esterilizado, y hacer vacío (ayúdate del baño maría). Si no conseguimos un cierre hermético y el vacío, no la consumas pasadas 48 horas.