La salsa mayonesa o mahonesa, si hacemos honor a su origen balear, puede ser tan saludable como cualquier otra receta casera siempre y cuando cuidemos los ingredientes en su elaboración. Aunque existe la creencia de que la mahonesa es una bomba de calorías, si la elaboras siguiendo estos pasos y consejos, podrás disfrutar de una mayonesa light casera tan a menudo como el plato lo requiera o tu estómago te lo pida. Eso sí, si optas por comprar la mayonesa preparada, el efecto ‘saludable’ se evaporará. No obstante, dado el aporte calórico que incluso esta receta de mayonesa baja en grasas suma, consúmela con moderación.
La receta tradicional, de por sí, es saludable, puesto que no lleva nada más que huevo, aove y una pizca de sal. La versión que vamos a explicar a continuación de mahonesa baja en grasa imita el sabor y la textura real de la común, pero con muchas menos calorías, ideal para ensaladas y para platos de verduras o arroces.
3CÓMO HACER LA MAYONESA LIGHT QUE NO ENGORDA
Una vez hemos enfriado el huevo cocido, se pela y se parte, colocando los trozos en el vaso de la batidora. A esto le sumamos el queso batido. En caso de que no tengas queso batido, puedes sustituirlo por el fresco o el untable. Incorpora la mitad del agua, la mostaza (que en realidad es opcional, aunque le da un toque diferente), el aove y la sal. Se debe triturar hasta que se integren todos los ingredientes, y quede una salsa fina y consistente. Si ves que queda demasiado espesa, ve agregando poco a poco agua hasta que alcance el punto perfecto. ¡Lista para disfrutar!