Uno de los mayores problemas que enfrentan los emprendedores es encontrar la financiación que les hace falta para poner en marcha su negocio y dar los primeros pasos hacia el éxito. Cuando un proyecto todavía no está asentado, o incluso todavía no existe, no es nada extraño oír un “no” por parte de los bancos. Por suerte, hoy en día hay otras alternativas de financiación además de las entidades financieras.
Sin embargo, el emprendedor debe ser consciente de que no puede satisfacer todas sus necesidades de financiación recurriendo a préstamos, ya que estos al fin y al cabo tienen un coste. El objetivo es que, una vez en marcha, el negocio sea capaz de sostenerse económicamente por sí solo, reduciendo su necesidad de financiación de terceros. Para conseguirlo es importante obtener rentabilidad, pero también saber gestionar muy bien los ingresos. Por eso, vamos a ver algunos trucos muy útiles.
4Buscar clientes, una actividad imprescindible para los autónomos
El objetivo de tener un negocio es ganar dinero con él. Esto implica que los emprendedores nunca se pueden quedar parados en lo que a búsqueda de clientes se refiere. Una venta puede ser pequeña, pero siempre es mejor una venta pequeña que no vender nada. De ahí que una de las claves para sobrevivir financieramente sea estar atento a toda oportunidad de ganar clientes.
Junto al marketing online y offline no hay que olvidarse de otras formas de darse a conocer como las ya clásicas tarjetas de visita (que siguen siendo eficaces hoy en día), el boca a boca e incluso el networking que tan de moda está entre los emprendedores.