La sal últimamente está siendo «perseguida», junto con el azúcar, en esta vorágine de comida sana y cuidar tu organismo. Pero como todo la virtud está en medio y ni debes de abusar pero tampoco dejar de tomar, en este caso sal. Pero lo que nos ocupará ahora es que, una vez aclarado esto, qué tipo de sal conviene en cada caso y cuál usar: si la fina o la gorda.
La sal potencia los sabores de los platos, y además es imprescindible para el organismo. Pero si consumes la primera que tomas en el supermercado, ya es hora de que conozcas cada tipo de sal, sus beneficios y de qué forma se usa en la cocina. La vida requiere de este aditivo y hay que evitar lo soso, y más en los tiempos que corren.
4La negra y la ahumada
Son otras dos sales propias de gourmet y de la cocina de calidad. La negra, que cristaliza bajo el sol, tiene un añadido de carbono activo, que le confiere su color único, su textura sedosa y un sabor muy característico. Al tener el carbón activo propiedades saludables, es un gran aliado en dietas desintoxicantes y tiene grandes beneficios digestivos. ¿En qué platos tomarlo? Aporta un acento distinguido a platos como los huevos, las patatas y el carpaccio.
Por su parte, la ahumada es otra sal gourmet que da un sabor especial sobre todo para los asados o hechos al grill. Es ideal para acompañar al salmón y a cualquier cocinado sobre lumbres de leña.