Jeff Bezos y otros de los hombres más ricos del mundo buscan invertir parte de su dinero para revolucionar el futuro de la humanidad. Algunos tratan de buscar la inmortalidad, o frenar el envejecimiento, curar ciertas enfermedades que ahora no tienen cura, o crear proyectos realmente sorprendentes. En el caso del magnate de Amazon, se ha propuesto crear un reloj que dure 10.000 años.
Por cierto, en este proyecto invertirá 42 millones de dólares y el objetivo es aún más sorprendente que las cifras…
3El proyecto de Jeff Bezos
Estos enormes relojes, como el financiado por Jeff Bezos, están compuestos por materiales muy resistentes y estables para perdurar todo ese tiempo. Uno de los materiales que se incluyen en su composición son las cerámicas, el acero inoxidable, o el titanio.
Su diseño puede parecer muy primitivo, de hecho es como un reloj clásico, pero realmente es bastante sofisticado y compuesto de varias partes. El mecanismo se compone principalmente de varios engranajes, unos 20. Pero son muy especiales, como es el engranaje de la cruz de malta que puedes ver en la imagen anterior.
Este tipo de engranajes hace que sea mucho más preciso que los convencionales. Esa precisión es fundamental para medir el tiempo adecuadamente, más cuando se pretende que dure tanto tiempo.
Mecanismo
Los 20 engranajes del cuerpo principal del reloj de Jeff Bezos tienen un tamaño considerable, nada parecido a los engranajes que pueda tener un reloj convencional, ya que pueden medir hasta 2.5 metros de diámetro y pesar hasta 453 kg. Unos auténticos titanes responsables de que el reloj pueda moverse adecuadamente para medir el tiempo.
Además, cuenta con unos timones que harán una serie de melodías cuando avance, y que sonarán en el interior de la montaña. Esas melodías no serán las mismas, y se ha hecho aposta así. La idea es que como el tiempo es algo pasajero y progresivo, las melodías deberían ser diferentes.
Aunque parezca algo tosco, lo cierto es que es una verdadera obra de la ingeniería, casi un sistema informático (similar a la máquina diferencial de Babbage) hecho de mecánica con unas ranuras y correderas para realizar unos cálculos digitales para generar las 3.5 millones de melodías diferentes que se pueden reproducir.
Y lo mejor es que no necesitará electricidad para calcular ni funcionar, por lo que incluso si hay apagones podrá moverse con total libertad sin dependencias. La energía que necesita para moverse las obtiene de las diferencias de temperatura entre el día y la noche en esta zona desértica. Una ventana dejará pasar la luz solar para calentar una cámara de aire que terminará haciendo girar un cilindro de grafito, generando la energía para mantener el péndulo en movimiento y corregir la hora del reloj a partir de la posición del sol a mediodía.
Muchas de las partes del reloj no se pueden ver, ya que están a oscuras en el interior de la montaña y solo se dispone de un punto de luz que deja ver solo la cara del reloj de unos 2.5 metros de diámetro. Esa será la parte visible que puedan ver los visitantes. Y no mostrará solo la hora actual, sino la hora que era la última vez que fue visitado por otra persona.