La miel es uno de los productos naturales más apreciados. Y no solo por el sabor dulce, su textura y versatilidad, sino también por las numerosas propiedades que se le han encontrado a este producto. Como potencial antibacteriano, antioxidante natural, un saludable sustituto del azúcar, fuente de proteínas, mejora la digestión, para aliviar la tos o problemas de garganta, ayudar al sistema inmunitario, etc.
Al ser algo tan preciado, muchos productores de miel adulteran (mezclas con azúcar, siropes baratos, etc.) sus productos para abaratar precios y venderte algo que realmente no es miel 100% o cuya procedencia no es europea. Además, los etiquetados son a veces muy confusos, y podrían estar vendiéndote algo que no es realmente lo que estás buscando…