El otoño también es rico en productos de temporada: las manzanas están en su apogeo; la pera de temporada está espectacular, con las lluvias han florecido las setas y los hongos para los amantes de la micología… y también aporta algunos frutos que son manjares muy versátiles y que identificamos con el frío. Y es que no hay nada como caminar cuando arrecia el frío con unas castañas recién asadas en las manos. ¡Calientan el alma! Sin embargo, las castañas nos dan mucho más juego en la cocina, como nos hemos propuesto mostraros. Ya sea para hacer un puré de castañas, una crema suave, como salsa o como dulce, las castañas son un alimento nutricionalmente saludable que merece la pena conocer y probar. Te enseñamos cómo preparar una crema de castañas exquisita en muy pocos minutos.
A nivel nutricional, las castañas son ricas en minerales básicos como el hierro, el calcio y el fósforo. Como cualquier otro fruto seco, también aporta sodio y potasio en cantidades más que notables. Aunque, eso sí, la castaña es uno de esos frutos de las naturaleza que los diabéticos deben moderar su consumo. Por el contrario, se tiene como un alimento muy adecuado tanto para niños como para embarazadas y personas mayores -siempre y cuando, insistimos, no sean diabéticos-.
5HACEMOS LA CREMA CON LAS CASTAÑAS
Ahora ya nos ponemos en los fogones a pochar la cebolla y el puerro, que debemos picar bien fino. Cuando comiencen a ablandar, añadimos las castañas cortadas y rehogamos todo durante unos 5 minutos para que tomen el sabor antes de añadir el vino blanco. Dejamos que este evapore el alcohol y sumamos la pastilla de caldo desmigada al máximo. Dejamos todo en el fuego hasta que las castañas ablanden antes de triturarlo todo en la batidora. Es aquí donde incorporamos la nata al tiempo que trituramos todo para que resulte una crema homogénea sin ningún grumo. Finalmente, lo dejamos en fuego medio hasta que dé un hervor y en caso de necesitar, rectificamos la sal.