Los perros Toy se llaman así, o perros juguete, porque son pequeños de tamaño y su peso ronda los 3 a 5 kilos. Si son más kilos pueden incluso morir por su pequeño tamaño. Algunos nacieron así de forma natural, aunque muchos otros surgieron tras una cruza selectiva.
En todo caso, todos ellos estás siendo muy populares en todo el mundo, y cada vez más personas que quieren una mascota se plantean recurrir a estos perros por su belleza y facilidad de llevar a cualquier sitio.
Estos perros tienen rasgos muy similares entre sí, con ojos grandes y saltones de color oscuro y pequeño cuerpo redondeado para ser transportados con facilidad. También pueden tener hocico chato o poco alargado, pelaje abundante y sedoso.
Pueden dar mucho cariño a sus dueños y se llevan bien con los niños (excepto algunas razas). Los puedes llevar a donde quieras fácilmente.
Los perros toy son manejables y pequeños, por eso se adaptan mucho a casi todos los ambientes. Pueden vivir en sitios de reducidas dimensiones, aunque tienen que caminar para ejercitar y sacar la energía que tienes dentro.
2Los perros tacita de té y su triste vida
Algunos los conocen también como perros toy, y aunque no son lo mismo conviene conocer cómo es la vida de estos perros. Producen mucha ternura y destacan por su pequeño tamaño. Sin embargo, este no es así por casualidad.
Estos perritos nacen debido a diversas actividades que realizan los criadores para asegurarse de su pequeño tamaño. El problema es que estas ponen la salud de los canes en riesgo, incluso con peligro de muerte.
Los perritos taza de té y perros toy pertenecen a razas pequeñas con un tamaño menor del habitual. Aunque en principio se veían en Estados Unidos y Corea del Sur, ahora se ven más en otros países como España.
Cada vez se ven más, y aunque antes puede que solo los vieras en foto actualmente es muy probable que hayas visto más de uno en directo. Ahora es posible tener estos perros en casa pagando por ello, y a costa de nuestra nueva mascota.
Algunos perros anormalmente pequeños pueden deberse a un defecto congénito casual, aunque lo más habitual es que surjan de prácticas poco éticas de criadores.