Cada día los seres humanos nos tenemos que enfrentar a un sinfín de desafíos, y muchos llegan de una manera tal que no sabemos qué hacer. Por ejemplo, un producto que es esencial encasa que sirve para muchas cosas como lo es la miel, casi que nadie sabe cuándo está en mal estado, y cuando se ha estado conservando de manera efectiva.
Pues bien, hay detalles que marcan la diferencia, por lo que aplica de una manera relevante el aforismo que indica que conocimiento es poder, y la verdad es que lo es, y con la miel ganarás un punto a tu favor de cara a que sepas todos los detalles sobre su uso, y detectes si está en mal estado, pues la idea en todo momento es que puedas aprovechar sus propiedades, ya que el rico sabor de la miel es algo que a todos nos fascina.
La verdad es que los hábitos en casa hacen que no le prestemos atención a este tipo de aspectos, pero si de ahora en adelante comienzas a detallar cómo luce tu miel, seguramente podrás darle una mejor conservación y te durará más tiempo. Te presentamos las claves para que sepas si la miel que tienes en tu hogar está en mal estado, y cómo puedes hacer para que dure más.
3La miel vence: Mitos y verdades
Existen visiones encontradas sobre la caducidad de la miel. En este espacio queremos indicarte que si bien es cierto que la miel no se vence, en 2 años, es un tiempo más que prudencial para que por lo menos te hayas acabado la presentación que compraste en el supermercado. Sería lo ideal, pues si las propiedades de la miel están potenciadas desde su fabricación, cuando llega al consumidor y la abre por primera vez, comienza ese juego de preservarla en un buen ambiente, porque cualquier mínimo descuido arruinará tu piel.
De hecho, puedes ver que está en mal estado, cuando el envase donde viene la miel se concentran trozos de azúcar, y esto es un indicio que la has mantenido en lugares no adecuados para su conservación. Vas a notar como pierde su color, si la pruebas es como si te llevaras a la boca sólo azúcar, y no habrá agua, que bien sabemos forma parte de la miel en poca proporción, pero está.
No conforme con esto, te darás cuenta que no es posible sacarla de la botella ya que habrá quedado pegada allí y no hay nada que puedas hacer. La miel dura mucho, pero depende de la persona que la use. Sobre todo taparla bien, y no dejar espacio al ambiente que la daña rápidamente.