Las estafas con los productos está a la orden del día, especialmente con la alimentación, como algunos pescados codiciados que se intentan falsificar (véase atún rojo, cazón, chanquetes,…). Además, con la etiquetas también se pretende dar una imagen falsa o confundir al consumidor para atraerlo. Un punto crítico está en los etiquetados como light, que suelen ser bastante dudosos. Afortunadamente, algunos etiquetados están entre los más fiables, como los de Mercadona y Eroski, etc.